La bronquitis es una inflamación de las vías aéreas bajas. Sucede cuando los bronquios, situados entre los pulmones, se inflaman a causa de una infección o por otros motivos.
Clasificación
Según su duración y etiología, se distingue entre bronquitis aguda, de corta duración, y bronquitis crónica, de larga duración y con recidivas frecuentes.
Síntomas y signos
Los síntomas incluyen:
-Tos con mucosidad, a veces sanguinolenta. Si el moco de la bronquitis es verde amarillento y va acompañada de fiebre, lo más probable es que haya infección bacteriana.
-Inflamación de los bronquios (ramificaciones de las vías aéreas entre la tráquea y los pulmones)
-Inflamación (edema) de las paredes bronquiales.
-Obstrucción de los alveolos.
-Pitidos o sibilancias.
-Burbujeo (referido al efecto sonoro que se aprecia cuando se ausculta al paciente con un estetoscopio)
-Dificultad respiratoria.
-Malestar general.
En la bronquitis crónica, también pueden presentarse los siguientes síntomas:
-Inflamación de tobillos, pies y piernas.
-Coloración azulada de los labios provocado por los bajos niveles de oxígeno en sangre.
-Propensión a sufrir infecciones respiratorias —como resfriados y gripe—.
Tratamiento
Si se considera que la bronquitis es bacteriana, por regla general se trata con antibióticos. Es común el uso de amoxicilina. En casos de asma, suelen usarse inhaladores para evitar las asfixias —broncodilatadores— o la inflamación —esteroides—. Para los cortes en la respiración (disnea) debidos al broncoespasmo, suele usarse un inhalador de rescate de salbutamol. Existen otros inhaladores que pueden ser prescritos para un uso diario. O compuestos de amoxicilina con acido clavulanico por 8 dias aproximadamente y sobre todo aislarse del frîo para no complicarla.